Que cruzar el Cordal siempre fue cosa peligrosa me quedó claro muchas veces. Así lo pensaba a la puerta del Ruchu, mirando por los cristales el caer cada vez más violento de la nieve. ¡Cuántas historias habré oído sobre el paso de la meseta hacia la marina asturiana! Casi siempre que paso el Puerto de Pajares, paro en este bar de carretera. Las vistas son impresionantes. Apenas uno empieza a descolgarse del puerto hacia el mar, se deja caer a la derecha para tomar un descanso y entonces le mece la peña y el vértigo al ritmo de un café que, como el puerto, es algo más que un café,…
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Otra vez el tren
Mientras escribo estas líneas, tengo ante mí la foto familiar más antigua que conservo. Un día la encontré en un cajón, cubierta de polvo, en la casa que fue de mis abuelos en la Robla. Después la traje para ponerla aquí, como un tesoro, sobre mi mesa. En ella aparecen unos tatarabuelos míos acompañados por tres de sus hijos. Es una foto de estudio, con un decorado barroco desdibujado por detrás. Ya se sabe, una de esas fotos de finales del siglo XIX donde los miembros del matrimonio, o a veces solo el hombre de la casa, posaban sentados con cierto aire de majestad (era cuando los hijos trataban a…
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El atardecer del Hullero
El otoño y la melancolía tienen una relación fuera de toda duda. Dejamos atrás la explosión juvenil del verano y nos embarcamos en un atardecer nostálgico que nos pone a las puertas del ocaso. Los días se acortan y nuestra mirada languidece al posarse sobre una luz y unas cosas que empiezan, otra vez, a ponerse mustias. Pero es este un pesar que encuentra, sin embargo, cierto solaz en algunas cosas (que la melancolía requiere cierto recreo en la tristeza) y el paisaje es sin duda una de ellas. Algunos de los paisajes otoñales que mejor recuerdo, y que creo que comparto con muchos leoneses, son los que vi alguna…