• Corriente. DAVID CAMPOS, 2023
    Contraportada,  Diario de León,  El Retrovisor

    Verano, otoño

    Todos los años, por estas fechas, escucho machaconamente Septiembre del grupo madrileño Los Enemigos. La letra de esa canción expresa de maravilla esa reacción inmensa que sentimos contra la vuelta a la realidad, la rebeldía contra un mes que nos mete la cabeza a la fuerza en el gran molino que todo lo muele. Ni usted ni yo queremos morir, pero lo cierto es que caemos un poco mientras dejamos atrás el verano y volvemos a la rutina, por mucho que encontremos un pequeño consuelo en una suscripción al gimnasio o a un curso de idiomas. Septiembre es melancolía. Echo un vistazo al verano y recuerdo, en los montes de…

  • Mosca. DAVID CAMPOS, 2023
    Contraportada,  Diario de León,  El Retrovisor

    Moscas

    Estos días pasan para mí como pasa cualquier día de verano: una máquina de segar, unos largos en la piscina, algunos libros. Ya se sabe que los días y las noches del verano se hicieron para el hedonismo. Que si los rayos del sol pellizcan la piel, que si la grasa crepita al tocar el fondo de las barbacoas y hay hogueras que alumbran conversaciones triviales. No hay rutina ni trabajo que pueda con su fuerza. Corros de jóvenes pasan las tardes olvidando que el tiempo existe. Suena el estruendo de los cohetes de las fiestas, huele a ajo, a sexo. Las sombras se alargan, interminables, cada tarde. Es el…

  • Cometa. Picos de Europa. David Campos. 2014.
    Contraportada,  Diario de León,  El Retrovisor

    Esas inmensas noches de verano

    Las noches del verano provocan una profunda evocación. El buen tiempo permitió siempre a la gente estar al raso, pasar largos ratos bajo las bóvedas de esa catedral que se ilumina a veces con la fuerza de un millón de cristales y sentirse ínfimos ante tanta inmensidad. Hoy, que escribo estas líneas al abrigo de un infinito cobertor de estrellas, no puedo dejar de recordar esa vaqueirada que cantan por ahí arriba, en esos montes que la luna perfila al fondo del valle: «Ay, qué nueite tan serena, que nun tien movimientu/ Ay, quién pudiera tener tan serenu´l pensamientu». Mirar hacia arriba, hacia esa calma vibrante que tienen los cielos…