Belén. David Campos (2018)
Contraportada,  Diario de León,  El Retrovisor

Cien años de navidad

Con la aspiración de repaso que suelen tener estas fechas, viajaremos en esta sección para recordar la celebración de la Navidad en el León de hace un siglo. Así que ponga el lector su mirada en blanco y negro y aterrice por un momento en 1919. Para ayudarnos, tomaremos algunos ejemplares de este Diario de León que usted está leyendo.

            Andaba por aquellas fechas España apartada del concierto de las naciones importantes, las que remataban ese año las conclusiones de la Paz de París, que había terminado hacía un año la I Guerra Mundial y había que hacer pagar a Alemania. Muchos países quedaron destrozados tras el conflicto y en las parroquias de León se leía la encíclica del papa Benedicto XV recordando el miserable invierno que se estaba viviendo en Europa Central y haciendo colecta para remediar la miseria de sus gentes.

            Pero no solo la caridad ponía su vista tan lejos, que también había pobres en León y parece que abundantes. Nos cuenta el Diario que por aquella época la Asociación Leonesa de Caridad tenía 280 acogidos para una población de veinte mil habitantes. El menú que ofreció el día de Navidad para los menesterosos consistió en paella, carne guisada y mantecadas. También los Talleres Santa Rita entregaban su aguinaldo de Pascuas en el Colegio de los Agustinos. La presidenta recordaba que “las prendas repartidas hasta el día de hoy en los pocos años que lleva de existencia el taller son 9623, habiendo sido todas de excelente calidad atendiendo a la dureza de nuestro clima”.

            Otros, sin embargo, no sufrían tantas penurias. Algunos anuncios del periódico vendían excelentes productos para la celebración de las fiestas. Así la confitería “La Leonesa” ofrecía a “su numerosísima clientela, turrones de todas las clases y cajas de mazapán, conteniendo exquisitas anguilas y caprichos con artísticos decorados, vinos y licores de todas clases”. Como curiosidad, la confitería de don Miguel Carpintero exponía también en esas fechas una primera plana del Diario de León con firmas de Peñaflor, Espinel o Lamparilla.

            Y aunque suponemos que aquellos productos estarían reservados a cenas entrañablemente  familiares, sin embargo el rotativo nos cuenta que durante la Nochebuena de aquel año “la animación que reinó desde las diez de la noche en adelante por nuestras calles fue extraodinaria, entonándose miles de canciones y cometiéndose regulares escándalos lo que hizo que la Casa de Socorro se viera concurrida con algunos “alegres” que fueron a que se les asistiera de ataques de alcoholismo agudo”. Concluía el artículo publicando amablemente los nombres de algunos de los atendidos.